quiénes somos
El Sitio - El Hierro
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El Sitio, un lugar único
¡El Sitio es un lugar familiar con más de 25 años, en el cual disfrutamos de lo que hacemos!
Nuestro equipo no es solo un grupo de compañeros de trabajo, sino de compañeros del corazón. Cada uno pone su parte especial y personal para hacer del Sitio un lugar único.
El Sitio
Nuestra historia
Una casa con alma y raíces profundas
Aunque El Sitio abrió oficialmente sus puertas en 1996, la historia de esta propiedad comienza mucho antes: siglos atrás, cuando la vida en El Hierro seguía el ritmo de las estaciones y las “mudadas”.
Antiguamente, las familias herreñas vivían en las zonas altas de la isla, pero durante los meses de poda y vendimia se mudaban al Golfo, donde cultivaban sus viñas y elaboraban sus propios vinos. Esta casa fue testigo de aquel modo de vida.
La casa principal – hoy la recepción y sala de yoga – tiene más de 150 años. En su época fue una de las viviendas más grandes de la zona. La antigua bodega, donde hoy se encuentra la acogedora recepción, servía para almacenar alimentos; la actual sala de yoga era el dormitorio familiar. El baño estaba lejos, en el exterior; la salita de masajes fue en su día la cocina, y en el cuarto de las bestias, hoy la lavandería, se guardaban los animales.
Cuentan que hacia 1935 vivieron aquí dos curas que poseían la primera radio del Golfo. La gente del pueblo se acercaba para escuchar las noticias del mundo y luego subía a la iglesia de La Candelaria a rezar.
En 1994 la propiedad pasa a manos de la actual propietaria, ya entonces en estado de abandono. A partir de entonces, y con mucho respeto por la arquitectura tradicional herreña, se construyeron las siete casitas vacacionales. Tras meses de trabajo, el 24 de julio de 1996 nace oficialmente El Sitio.
«El Sitio es desde sus principios, un lugar en el que se vive la sostenibilidad, la conexión con la naturaleza y donde ofrecemos un ámbito de experiencias para el desarrollo personal. Aquí el alma se puede tranquilizar y desarrollar»
– Sabine Willmann
Nuestra misión
Un viaje hacia adentro
No siempre hay que emprender una gran peregrinación para encontrar sentido.
A veces, basta con llegar a una pequeña isla en medio del Atlántico.
La tranquilidad, el silencio y la cercanía a la naturaleza permiten escucharse, conectar con lo esencial y reconocer que toda nuestra vida es un viaje único hacia uno mismo. Desde esta calma surgen la creatividad, el equilibrio y una forma de estar en el mundo más consciente, en paz con uno y con todos.
En El Sitio se dan las condiciones para detenerse, respirar y reconectar.
Un lugar para encontrarse, reinventarse, compartir…
Acompañado por la fuerza de la naturaleza y por la presencia serena de los demás.
